UN PASEO PARA RECORDAR

UN PASEO PARA RECORDAR

ESE ERA EL TÍTULO DE UNA PELÍCULA ROMÁNTICA QUE VI HACE AÑOS. ANTES, ME ENCANTABA VER LAS PELÍCULAS CON ESA TEMÁTICA; PERO, YA DIGO, LLEGÓ EL MOMENTO EN QUE DEJÉ DE VERLAS, PORQUE NUNCA ERAN REALES Y ME TRASLADABAN A UN INFIERNO DE INSATISFACCIÓN QUE ME IMPEDÍA SER FELÍZ.

PORQUE LA VIDA REAL, LA QUE VIVIMOS CADA DÍA, NO ES COMO LA QUE SE VE EN LAS PELÍCULAS ROMÁNTICAS, YA QUE TIENEN LA MISMA TRAMA, PRÁCTICAMENTE (CHICO Y CHICA SE CONOCEN, SE ENAMORAN, SUCEDE UN MALENTENDIDO Y ROMPEN. PERO, AL FINAL, TODO QUEDA ACLARADO Y ACABAN JUNTOS, FELICES PARA SIEMPRE) Y SIEMPRE TIENEN UN FINAL FELÍZ.

LA VIDA REAL, AL MENOS LA MÍA, ESTÁ LLENA DE SINSABORES, DE TROPIEZOS, DE CAIDAS, DE SUFRIMIENTOS. Y NO SOY CATASTROFISTA. PERO, TAMBIÉN ESTÁ LLENA DE ALEGRÍAS, TODAS QUE VIENEN DE PARTE DE DIOS.

Y HOY, DOMINGO DE RAMOS ES UNO DE ESOS DÍAS EN QUE DIOS ME MUESTRA TODO SU PODER. EL PODER DE LA HUMILDAD Y LA OBEDIENCIA. CRISTO, PALABRA POTENTE, QUE DERRIBA DEL TRONO A LOS PODEROSOS Y ENALTECE A LOS HUMILDES. Y, CUANDO VIVO PLENAMENTE ESTE DÍA, EL FRUTO SEGURO ES LA ALEGRÍA INTERIOR.

SALIMOS TODOS EN PROCESIÓN, LLEVANDO EN NUESTRAS MANOS LAS PALMAS DEL MARTIRIO, CANTANDO “¡HOSANNA!”. Y ÉSTE ES UN CAMINO PARA RECORDAR.

EL CAMINO, ESE PASEO TAN ESPECIAL, ES COMO MI MISMA VIDA. ES UN RECORRIDO LARGO, CON PELIGROS DESCONOCIDOS QUE VAN SALIENDO AL PASO. SE LO QUE REPRESENTA LA PALMA, QUE SUELE SER LA MÍA Y LA DE MI MARIDO (QUE VA CANTANDO DETRÁS). ES LA PALMA DEL MARTIRIO, DEL MARTIRIO DE CRISTO QUE HA DE SER EL MÍO, EN EL OFRECIMIENTO DE TODO MI SER, POR AMOR, ESPECIALMENTE A MIS ENEMIGOS.

¿CÓMO CAMINAR CON ESE PESO? ¿CÓMO NO DEJAR DE LADO ESE RÍO DE GENTE, QUE VA CAMINANDO CONMIGO, LLEVANDO SU PALMA? ¿QUÉ FUERZA ME RETIENE Y ME HACE SEGUIR CAMINANDO?

LAS MEDIACIONES DE DIOS SIEMPRE SALEN AL PASO DE MI DEBILIDAD. NINGUNO DE LOS QUE CAMINAN CONMIGO ESTÁ DE MÁS; TODOS ME AYUDAN CON SU PASO FIRME.

EL ESPÍRITU SANTO DESPLIEGA SU FUERZA, DEFENDIÉNDOME DEL MALIGNO QUE ME TIENDE TRAMPAS A CADA MOMENTO.

Y EL FINAL, LO QUE DIOS ME VA A REGALAR AL FINAL DEL CAMINO, DEL PASEO: SU HIJO MISMO, SU CORDERO QUE SE ENTREGARÁ SOBRE EL ALTAR POR MI Y SE ME OFRECERÁ TOTALMENTE COMO ALIMENTO DE VIDA.

CUANDO LA MIRADA ES CLARA, CUANDO DIOS PONE SU COLIRIO DE FE EN MIS OJOS, ¿CÓMO OLVIDAR UN PASEO TAN PROVECHOSO, EN EL QUE EL PREMIO ES CRISTO MUERTO Y RESUCITADO?

RUEGO A DIOS QUE, AL HABER TRASPASADO ESTA PUERTA PRECIOSA, QUE ES ESTE DOMINGO DE RAMOS, Y QUE ABRE ANTE MI LA SEMANA SANTA, ME CONCEDA SEGUIR “PASEANDO” CON MIS HERMANOS, ILUMINADA POR LA LUZ DE SU HIJO Y POTENCIADA POR LA FUERZA DE SU SANTO ESPÍTU, HASTA QUE CELEBREMOS SU RESURRECCIÓN EL PRÓXIMO DOMINGO, IMAGEN DE LA QUE NOS ESPERA AL FINAL DE NUESTRA VIDA EN ESTA TIERRA. AMÉN.