sábado, 29 de enero de 2011

Un libro, un tesoro

Me ha gustado leer desde pequeña. Como creo que ya comenté en alguna ocasión, por mis manos pasaron libros de todos los temas, incluido alguno de sexo que mis padres ocultaron a mis ojos, pero, como sabía de ellos, los busqué y los lei. ¡Me hicieron bastante daño!
Desde hace muchos años, mis gustos en lectura cambiaron radicalmente. Me limité a buscar los de espiritualidad, de santos, documentos de la iglesia, encíclicas, ...
El último que he leido, "devorado" se podría decir, ha sido uno que me regalaron unos de mis consuegros esta última Navidad. "La cabaña".
Después de haberlo acabado, me he quedado, cómo decirlo, "llena". El tema que trata no pienso revelarlo, pues os invito a que lo leais.
Por hoy, no quiero decir nada más; si he escrito en el blog ha sido para animaros a leerlo, y luego, me comentáis qué os ha parecido.
Yo de todo el libro hay una cosa que dice sobre la Iglesia, que, o no he entendido, o si lo he entendido, no estoy muy de acuerdo, pues uno de los personajes comenta que en el mundo, entre otras cosas, la Iglesia no es necesaria.
Por favor, que alguien me aclare si lo he entendido bien. Pues mi experiencia es que la Iglesia me es muy necesaria, ya que no me veo viviendo mi Fe como una "guerrillera", sino "acompañada" por hermanos que me ayudan, se dejan ayudar por mi, me escuchan, me hablan para que les escuche, ..., etc.
Bien, esperaré pacientemente a que alguien se atreva a leerlo. No creo que sea demasiado caro, pues lo hay de bolsillo.

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